Uno de cada cuatro megavatios de la nueva potencia instalada en Europa en 2019 tiene pasaporte español.  El Viejo Continente ha instalado 16,7 gigavatios (GW), lo que supone un aumento del 104% respecto a los 8,2 gigavatios instalados el año anterior.

Según Solar Power Europe «el país soleado regresa al lugar solar más importante del continente, 11 años después de ocupar el cargo por última vez», así que podemos decir que España está de enhorabuena porque se ha convertido, y de lejos, en el mercado solar más grande de todo el territorio europeo con la puesta en marcha de 4,7 gigavatios de nueva instalación fotovoltaica.

Según el «EU Market Outlook 2019-2023» de Solar Power Europe, presentado durante la COP 25 dentro del evento ‘A Solar-Centered Energy Mix to Fight Against Climate Change’, el 2019 se ha convertido en uno de los mejores años para la energía solar en la Unión Europea. Un año que va a ser enmarcado por el sector fotovoltaico europeo, y especialmente por el español, durante muchos años.

Los mercados solares europeos que completan la lista de los principales productores son: Alemania (4 GW), Holanda (2,5 GW), Francia (1,1 GW) y, para sorpresa de muchos, Polonia, que casi cuadruplicó sus capacidades instaladas en 2019 hasta los 784 MW.

¿Por qué este «boom» solar?

Hay varias razones. La clave es la competitividad. La energía solar es más barata que cualquier otra fuente de generación de energía hoy en día, y su atractivo aumenta a medida que la curva de reducción de costes continúa a un ritmo mucho más rápido que en cualquier otra tecnología.

La fecha límite para que los estados miembros cumplan con sus objetivos nacionales vinculantes de energía renovable 2020 es otro factor importante. Además, ya han comenzado a prepararse para cumplir con el objetivo de 32% de energías renovables del Paquete de Energía Limpia para 2030. Los gobiernos están adoptando cada vez más la solar en sus estrategias climáticas, ya que la energía solar es la fuente de generación de energía más aceptada entre los ciudadanos de la UE, así como la más flexible y fácil de instalar y, a menudo, la de menor coste respecto a otras renovables.

El conjunto de herramientas y tecnologías que respaldan la energía solar es inmenso: de las subastas renovables, que muestran que la solar a gran escala puede ganar las licitaciones tecnológicamente neutrales frente a todas las demás tecnologías; al autoconsumo y al almacenamiento que atraen a los prosumidores en busca de reducir sus facturas de electricidad; pasando por los nuevos modelos de negocio que están habilitados por la digitalización, como el suministro de electricidad entre pares.

«La última tendencia que impulsa el crecimiento de la potencia solar son los acuerdos corporativo para conseguir suministro 100% renovable y a buen precio». Muchas empresas líderes han convertido a las energías renovables y los objetivos de desarrollo sostenible en una parte crucial de su estrategia, invirtiendo en proyectos solares junto a los centros de producción, así como en la firma de PPAs solares bilaterales ‘sin subsidio’ y virtuales de grandes parques solares, que compiten cada vez más con los precios de los mercados mayoristas

Pero, ¿cuál es el futuro que se espera de esta energía en Europa? Según Solar Power Europe, el escenario medio para el desarrollo anual del mercado solar fotovoltaico de la UE hasta 2023 es de un crecimiento continuo. La fotovoltaica brilla en la Unión Europea y seguirá siendo, en jerga del ‘pronóstico del tiempo’, brillante y soleada, con muy pocas nubes en el horizonte y sin lluvia por delante, en definitiva.

Desde Germanía nos sumamos a este futuro, con cada vez más parques solares instalados y más instalaciones de autoconsumo de alto rendimiento. Si necesita más información sobre las instalaciones fotovoltaicas, no dude en consultarnos para que le informemos de todas sus posibilidades.